Pregunta para el médico: hígado: ¿dónde está ubicado y cómo duele? Detalles sobre dónde está el hígado y cómo entender que duele

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El hígado, como muchos de los cursos de biología de la escuela saben, es un órgano no apareado.

Se encuentra en el hipocondrio derecho (aproximadamente dos dedos debajo de la región epigástrica).

El dolor en el hígado no es tan común.

No siempre los dolores en el área de este órgano hablan directamente sobre el daño hepático: además, puede reflejar el dolor de las fuentes más inesperadas.

Sin embargo, siempre con el desarrollo de la incomodidad uno debe ser cauteloso: las sensaciones desagradables surgen no por sí mismas, sino bajo la influencia de varios procesos patológicos.

Para no perder un momento importante, el paciente debe armarse con el mínimo conocimiento necesario.

Hígado: dónde está y cómo duele. Razones

Hablando sobre el hígado, el paciente debe saber no solo dónde está y cómo duele, sino también las causas probables. En su mayor parte, estamos hablando de patologías de los órganos del tracto gastrointestinal. Algunos de ellos afectan el hígado, otra parte no tiene nada que ver con este órgano. Según las estadísticas, las personas que abusan del alcohol, los alimentos grasos fritos, así como las personas que no se adhieren a la dieta, están en mayor riesgo. Entre las causas inmediatas están:

Hepatitis. La hepatitis es una lesión inflamatoria del tejido hepático. La derrota puede ser viral, tóxica (cuando se toman medicamentos y alcohol). Aquellos que previamente han estado en contacto con pacientes con formas virales de hepatitis (B, C), así como los que abusan del alcohol y aquellos que toman medicamentos hepatotóxicos (algunos medicamentos para tratar la hipertensión, etc.) corren un riesgo particular. Con la hepatitis, hay una sensación de plenitud en el hipocondrio derecho, el dolor es sordo y doloroso. En las primeras etapas del desarrollo de la enfermedad, el dolor puede no serlo. La hepatitis es aún más peligrosa.

Cirrosis. Contrariamente a la creencia popular, la hepatitis no es cáncer. Esta es una enfermedad independiente. A menudo ocurre como una complicación formidable de hepatitis continua a largo plazo. El hígado deja de hacer frente a sus funciones. Se sabe que las células hepáticas tienen un potencial regenerativo sorprendente, pero incluso su capacidad de regeneración no es suficiente. Hay una muerte rápida de las células hepáticas y su reemplazo con tejido cicatricial. En las primeras etapas, la cirrosis tampoco manifiesta síntomas alarmantes. El síndrome de dolor es intenso, los dolores son sordos, tirando. Coloración amarillenta de la piel, se pueden observar proteínas oculares. Las heces se decoloran, se vuelven blancas o beige claro (color arcilla). La cirrosis afecta principalmente a alcohólicos con experiencia. El abuso de alcohol, según las estadísticas, representa hasta el 85% de todas las causas de cirrosis. Pero no debe relajarse, nadie garantizará que el dolor no se deba al 15% restante.

Colecistitis. Inflamación de la vesícula biliar. La localización del dolor es el hipocondrio derecho (más cerca de la región epigástrica), sin embargo, a diferencia de la hepatitis, el dolor se define como cortante, agudo (daga). A menudo, la colecistitis se acompaña de heces deterioradas (casi siempre diarrea), sensación de amargura en la boca por la mañana y náuseas.

Formación de hígado. Los tumores benignos y malignos causan dolor de intensidad variable. Los adenomas, hemangiomas del hígado se caracterizan por un crecimiento lento y no dan síntomas obvios. Los tumores malignos, a medida que se forman, causan el desarrollo no solo de manifestaciones locales, sino también generales: un aumento de la temperatura corporal, dolor de cabeza, etc. Estas manifestaciones son permanentes.

Cálculos biliares. La enfermedad de cálculos biliares tiene manifestaciones similares a la colecistitis. Identifíquelos solo con la ayuda de estudios especiales.

• La mononucleosis es un tipo especial de lesión viral de las estructuras hepáticas.

• Abscesos hepáticos.

Otras enfermedades enmascaran bajo dolor en el hígado:

• Pielonefritis.

• Apendicitis.

• Osteocondrosis de la columna lumbosacra.

Hígado: dónde está y cómo duele. Medidas diagnósticas

Al conocer el hígado, dónde se encuentra y cómo duele, el paciente debe comprender que esto no es suficiente. Es imposible identificar independientemente la causa del dolor. Para esto, es necesario realizar una serie de estudios de diagnóstico especiales. Lo primero que debe hacer un paciente con dolor en el hipocondrio derecho es consultar a un médico. Es más lógico planificar una visita inmediata a un gastroenterólogo, ya que en la gran mayoría de los casos estamos hablando de enfermedades del tracto gastrointestinal (aunque no siempre en el hígado). Las sospechas sobre la fuente del dolor pueden no estar justificadas, entonces los siguientes expertos ayudarán:

• Nefrólogo. Con patologías de los riñones.

• Urólogo.

• Ortopedista. Con enfermedades del sistema musculoesquelético.

• Neurólogo.

El diagnóstico de enfermedades del hígado y del tracto gastrointestinal en su conjunto no presenta ninguna dificultad particular.

El diagnóstico incluye:

• Toma de historia. El médico entrevista al paciente para comprender mejor la esencia de sus quejas. Entonces el especialista compone el cuadro clínico inicial.

• Palpación. La palpación es necesaria para una evaluación aproximada de la estructura del órgano (las neoplasias ya están determinadas por la palpación, con cirrosis hepática, el órgano adopta una estructura no homogénea). Además, gracias a la palpación, el médico evalúa las reacciones al dolor y su localización. Esta es una etapa necesaria del diagnóstico diferencial.

• Diagnóstico por ultrasonido. Por el momento, este es el método más informativo y económico de evaluación visual de la estructura del hígado y la vesícula biliar. Le permite identificar no solo enfermedades del hígado, sino también colelitiasis (incluso cuando los cálculos aún no se han formado).

• Gammagrafía. Permite estudiar la actividad funcional del hígado. Se introduce una preparación especial de radioisótopos en la sangre. Se acumula rápidamente en el hígado. La naturaleza de la acumulación del fármaco se controla mediante un sensor especial (en forma y tamaño se asemeja a un dispositivo de resonancia magnética abierto).

• MRI / CT. Se prescribe para sospechar patologías hepáticas graves, incluso para determinar la naturaleza y el tamaño de los tumores.

• Pruebas de laboratorio. El más informativo de todos es un análisis de sangre bioquímico (es necesario evaluar indicadores como AST, ALT). En algunos casos, se puede recetar un análisis de sangre para marcadores tumorales.

Gracias a estos estudios, es posible determinar con precisión la causa inicial del dolor.

Hígado: dónde está y cómo duele. Primeros auxilios y tratamiento

Después de descubrir dónde está el hígado y cómo duele, así como al final de las medidas de diagnóstico, podemos hablar sobre el tratamiento.

Es importante tenerlo en cuenta. Solo puede detener el síndrome de dolor usted mismo (antes de visitar a un médico). Si el dolor es intenso y no puede aliviarse solo, debe llamar inmediatamente a una ambulancia.

Para aliviar el dolor, necesita:

• Tome una píldora antiespasmódica (No-shpa, Duspatalin, Drotaverin, etc. son adecuadas).

• Elimine la actividad física y tome una postura cómoda.

• Antes de aliviar la afección, excluya la ingesta de alimentos.

Si estas actividades no ayudaron, debe llamar a una ambulancia.

En general, el tratamiento del dolor en el hígado consiste en tomar medicamentos especiales. Raramente se recurre al tratamiento quirúrgico y solo si está indicado.

En el tratamiento de patologías hepáticas, se prescriben los siguientes:

• Medicamentos antiinflamatorios. Para aliviar la inflamación. Se seleccionan con mucho cuidado: muchos tienen un efecto hepatotóxico.

• Analgésicos. Se usan en combinación con antiespasmódicos para aliviar el dolor.

• Antiespasmódicos. Alivie el espasmo de los músculos lisos. A menudo, un espasmo es una fuente de dolor.

• Medicamentos hepatoprotectores. Asignado para restaurar las células hepáticas dañadas y proteger las sanas de los efectos adversos. Esto incluye muchos artículos: Essentiale, Gepabene y otros. No se recomienda tomar estos medicamentos por su cuenta: hay muchos efectos secundarios.

En algunos casos, se prescribe fisioterapia (calentamiento con resina, etc.). Está estrictamente prohibido calentar el hígado de forma independiente: tal "actividad propia" puede tener consecuencias impredecibles.

La cirugía se practica con colelitiasis, para trasplante. Afortunadamente, la medicación suele ser suficiente.

Por lo tanto, el hígado se encuentra en el hipocondrio derecho. El dolor puede ser diferente en naturaleza e intensidad: desde tirones menores hasta cortes agudos. Sin embargo, este conocimiento no le da nada al paciente: el dolor puede reflejarse y muchas patologías graves no aparecen en absoluto en las primeras etapas del dolor. Solo un conjunto de medidas de diagnóstico especiales pueden disipar dudas. Según los resultados de los estudios, el médico diagnosticará y prescribirá el tratamiento. La puntualidad y adecuación de la terapia es la clave para un resultado favorable.

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